28 de enero de 2022
Sí, el brownie estaba rico, tenía riqueza interior a pesar de su aspecto. Hoy quiero hablar sobre la muerte, no sé qué conexión pueda haber entre el punto de ojal y la muerte. Según su definición es que se trabaja de izquierda a derecha, la longitud de la puntada es variable. Se clava la aguja en la tela y se saca más abajo, en vertical, se enrolla el hilo alrededor de la aguja y se tira de ella.
No encuentro similitud, pero ahí están, dos formas de hacer, una para crear a través del bordado y la otra para interrumpir la creación. Esto último es lo que siempre nos han contado, al menos a mí, te mueres y se acaba todo. No, no se acaba todo, continúa. Claro si lo vemos desde la persona que se queda sin el que se ha ido, se vive como que todo se ha acabado, la vida ya no tiene sentido, pero eso es precisamente lo que hemos de hacer, vivir.
Soy una persona que aparte de bordar, leer, escribir, pasear, nadar, estar con mi numerosa familia, también soy una buscadora incansable sobre el tema de la muerte ¿Qué pasa cuando morimos? ¿Se cierran los ojos y ya? Por lo que he podido leer y estudiar hasta ahora, llevo más de diez años con este interés en saber qué pasa después, he comprobado por diferentes fuentes y autores que la vida continúa, el que muere deja un cuerpo, pero su alma sigue viva. Todas las corrientes religiosas conocidas hablan de este hecho.
Soñar, es otro de mis temas favoritos, el sueño y la muerte van de la mano. Cada noche al dormirnos es como si tuviéramos una pequeña muerte, es decir, no vivimos la realidad que creemos vivir en vigilia. Se dice que cuando dormimos es cuando más despiertos estamos porque es cuando nuestro inconsciente está activo y a través de los sueños y su simbología nos hace ver lo que tapamos cuando estamos despiertos.
Es un tema apasionante ¿no crees? Te invito a que pienses en ello y si te interesa el tema podemos hacer un trabajo juntos a través de la interpretación de los sueños y el bordado. Te espero.