21 de abril de 2022
Después de mi clase de natación, no sé muy bien por qué, he pensado que me siento como una tortuga, lenta, lenta como una tortuga.
A veces el caparazón también pesa, por eso he de hacer todo muy despacio para poder caminar y llegar a mi meta. Digo “a mi meta” porque no es una meta cualquiera, es la que he elegido yo.
Haber sido madre, bueno a ver… sigo siéndolo, quiero decir madre muy presente con tus polluelos alrededor y de repente decidir ir en busca de otras posibilidades, esas que siempre han estado bajo mi caparazón tortuguil y que ahora es el momento de sacarlas de paseo, dan un poco de vértigo, no sé si me entiendes.
Tipo… ahora con mi edad ¿adónde voy yo? o… (esta es muy buena) ¡qué bien lo hacen los demás y yo bueno… no llego a su altura. Hay muchas más, pero no las voy a sacar de paseo, ahora toca ponerse manos a la obra y confiar ¿Quién sabe? A mí lo que me gustaría mucho mucho sería ilustrar cuentos con bordados, o portadas de libros, estaría genial.
Así que si algún editor me lee… ¡HOLA! ¡AQUÍ ESTOY!
Mientras tanto te presento el punto de nudo turco. Es muy sencillo de realizar, crea un efecto de pompón o de alfombra. Lo que sí te recomiendo es que las puntadas las hagas muy juntitas y como siempre te recomiendo también, si te interesa este punto, ya sabes, busca las instrucciones en el libro de Marie Suarez que te lo explica perfectamente.
Comparto dos fotografías para que puedas apreciar como queda el bucle y después el resultado una vez cortado.
Espero al editor y su respuesta…
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